Dale más placer a una mujer estimulando sus 5 sentidos. Ni uno ni dos bastan para dejarla satisfecha, ellas necesitan todos. Oído, olfato, vista, tacto y gusto son partícipes del placer, no podemos hacerlos a un lado. A continuación pondremos algunos ejemplos de cómo atenderlos todos.
Oído:
A no ser que se de una situación morbosa y quieras un momento de s*xo “rapidito”, no hay nada menos excitante, que un hombre que quiere ir directo a la consumación s*xual, a la penetración.
Para estimular la líbido de una mujer, lo mejor que puedes hacer es empezar a seducirla con halagos, demostrándole que lo importante no es el s*xo en sí, sino compartirlo con ella. Dile lo deseable que se ve su cuerpo, lo apetitosa que te parece, lo sensual de su boca…puedes hacerlo con palabras sensuales o bien con otras más corrientes. Hay mujeres que disfrutan de las palabras un tanto explícitas durante el s*xo, eso depende de ti y de cómo creas que reaccione ella a estas palabras.
Además de excitarla con palabras, puedes dirigirla en su forma de darte placer, no con instrucciones, pero sí gimiendo, suspirando, dándole señales de tu goce, para que ella vaya viendo que cosas te satisfacen más y cuáles no te excitan demasiado. Gime si te está regalando una deliciosa felación, cuando dé en tus puntos clave, suspira, eso le indicara que te está gustando y continuara su labor de forma más impetuosa.
Las señales sonoras alimentaran su ansia y revolucionaran su excitación, fíjate al mismo tiempo en las indicaciones de su respiración y lo comprobarás…
Vista:
Olvídate de poner una película por. no, las mujeres suelen preferir las eróticas, porque las escenas de s*xo son menos explicitas y la protagonista femenina no tiene un papel sumiso. Para estimularla visualmente, puedes desarrollar tu propio guión, y si cuentas con el sentido del ritmo y del movimiento, desnúdate lentamente delante de ella y baila de forma erótica.
Si además creas un ambiente un tanto sugerente con velas, acompañado de música adecuada (nada demasiado estruendoso de preferencia), ella terminara por arrojarse sobre ti antes de que termines tu actuación.
Recuerda también que la privación de uno de los sentidos agudiza más los demás. Si le vendas los ojos estarás perdiendo algunas fuentes de erotización, pero puedes estar seguro de que no las echará en falta si te esmeras en potenciar sus otros sentidos.
Olfato:
Las regiones del cerebro que controlan el olfato, la memoria y la excitación s*xual están estrechamente vinculadas. El olor corporal, por si solo, aumenta la atracción gracias a las feromonas, incluso muchas mujeres aseguran preferir el olor corporal de sus parejas que el de las lociones o desodorantes (siempre y cuando no sea de tres días sin bañarte…). Descubre si a ella le excita tu olor corporal o le gusta que te perfumes.
Para despertar el deseo por medio del olfato de forma artificial, compra un lubricante de un olor que guste a tu pareja y aplícatelo especialmente antes de practicar el s*xo ., y si te preguntas cuales son los mas solicitados por las mujeres es simple, los de sabor chocolate. Pero ve probando para descubrir su favorito.
El olor ambiental también puede ser muy sugerente y excitante. Velas de olor o incienso pueden añadir ero.tismo al momento.
Gusto:
Según algunos estudios, el sabor dulce despierta los mecanismos psicológicos de recompensa en el cerebro, lo que incita la excitación. Para estimular su sentido del gusto prepara una bandeja con varios alimentos de diferentes texturas, véndale los ojos y dáselos a probar poco a poco, de tu mano, de tu boca, de tu órgano s*xual… Una alternativa de mayor graduación es haciendo lo mismo pero con licores.
En este punto también entran los lubricantes, aceites, geles y otros juguetes comestibles, así como los preservativos de sabores. Multitud de oportunidades para disfrutar del sentido del gusto.
Tacto:
Conoces la reacción ante los estímulos calientes ¿te has fijado en los fríos? ¿Y combinarlos? Además de las caricias y los masajes, los cambios de temperatura resultan de lo mas estimulantes.
Puedes optar por el clásico truco de dejar derretir un cubito de hielo sobre su abdomen o recorrerla con él en tu boca, utilizar uno de esos aceites de masajes que incrementan la temperatura corporal cuando se aplican. También tienes la opción de ofrecerle caricias orales alternando en tu boca sorbos de bebidas frías y calientes.
Ayúdate de diversos materiales para estimularla: tus manos, tus uñas suavemente, mordiscos de menor o mayor intensidad, plumas, sedas… Cuando se tiene los ojos vendados se es especialmente sensible a esta variedad de texturas.
Culmina la faena con un masaje en los pies para activar las terminaciones nerviosas conectadas con los genitales.
Hemos hablado de estimulación a la mujer, pero está de más decir que el hombre es igual de sensible a los estímulos de los sentidos.
También nosotros disfrutamos de la misma forma. 
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