Guanatitos

**outsidernow** · Publicado: Mar 15 2019 **Título**:

expresas las emociones muy bien

**Martha-16** · Publicado: Mar 15 2019 **Título**:

Gracias Profe 😚

**Dijousmercat** · Publicado: Mar 15 2019 **Título**:

**Martha-16** · Publicado: Mar 15 2019 **Título**:

**ANAIS** · Publicado: Mar 15 2019 **Título**:

Qué capacidad creativa para escribir Martha, mis respetos

**Magionne** · Publicado: Mar 15 2019 **Título**:

Felicitaciones, Martha...!!!

**Martha-16** · Publicado: Mar 15 2019 **Título**:

Awww muchas gracias a todos. Lo aprecio en verdad

**Martha-16** · Publicado: Mar 15 2019 **Título**:

Guanatitos
Segunda temporada
Episodio 2

Verdugo se despertó algo malhumorado, los achaques propios de la edad le molestaban un poco. Colocó un poco de ungüento en su pierna y se dispuso a preparar su desayuno.

_ Me prepararé un par de huevos estrellados, pan de centeno y un poco de jugo de naranja.

Verdugo era a.man.te. fiel de los animales, por lo que tenía un par de mascotas que atendía con mucho cariño.

Verdugo tuvo una infancia difícil. Un poco más tarde en la época de su juventud tuvo también una gran decepción amorosa que lo había cambiado rotundamente.

Verdugo creía en el amor pero en ese amor que él mismo fabricó para sí y para los demás, luego de lo sucedido. Un amor que él y sólo él entendía.

Vivía solo, un tanto ermitaño y taciturno. Gustaba del café, el tabaco, un trago de whisky o coñac, y sus libros. Amaba sus libros. Ellos le habían contado muchas historias de amor.

Recientemente, Verdugo había colocado un letrero en su domicilio. " Se escuchan historias de amor " por supuesto cobraba sus honorarios correspondientes.

Gustaba de escuchar a las personas y aconsejarles, basado en su propia experiencia y en todos y cada uno de los libros que había leído. Ellos le habían enseñado mucho también. Eran sus más fieles amigos.

Tenía unas cuantas a.man.tes de las que disfrutaba de vez en cuando sus favores.

Era un eterno enamorado del amor, de la mujer y del se.xo. le encantaba el se.xo lo disfrutaba al punto de la adicción.

Por tristeza en los últimos años, no estaba ya tan activo como en su lozana juventud.

_ Buenos días.
_ Buenos días.
_ Me envió tu médico tratante.
_ ...

El padre Ramírez se sentó justo enfrente de Martha.

_ ¿Quieres confesarte?
_ No.
_ ¿Qué te sucede?
_ ...
_ ...
_ Me siento muy mal, creo que es el final.
_ ¿Intentaste suicidarte?
_ No.
_ ¿Piensas en el suicidio?
_ Si.
_ ¿Qué te llevo a ello?
_ Todo estaba bien... Al menos yo creía que era así. Regresé del trabajo, cené, me metí a bañar y me fuí directo a la cama. Me sentía cansada.

Martha comenzó a sentirse ansiosa, al grado que empezó a hiperventilar.

_ ¿Qué sucedió?
_ Desperté alrededor de la una. No sé, creo que tuve una pesadilla. No puedo recordarlo. Me levanté de la cama, estaba empapada de sudor y fuí directo al baño. Comencé a vomitar y después mi cuerpo se empezó a paralizar. Tenía miedo, mucho miedo. Como pude salí del departamento y camine algunas calles, las piernas ya no me respondían. Llegué a un hospital y me trasladaron. Luego de algunos exámenes de laboratorio me diagnosticarón depresión y ansiedad.
_ ¿Sucedió algo antes?
_ Estaba bastante presionada en mi trabajo, tengo demasiadas responsabilidades y mi jefe es muy exigente.
_ ¿Lo platicaste con él?
_ No.
_ ¿Por qué?
_ Me exigí demasiado. Me obligué a cumplir al pie de la letra sus indicaciones y desempeñar mi trabajo casi a la perfección.
_ ¿Qué piensas hacer ahora?
_ No sé. No quiero sentir, no quiero pensar, no quiero vivir. No así. Esto no es vida, Padre.
_ La vida no es fácil para nadie, Martha.
_ Lo sé.
_ Ora.
_ Lo hago. En verdad lo hago. Sólo Dios sabe cómo le he pedido que venga en mi pronta ayuda. Lo necesito.
_ Voy a orar mucho por tí.
_ Gracias.
_ Dios nunca llega tarde. Da tanto en un momento, como a otros les ha dado en muchos años. Esfuérzate y se valiente.
_ Si.
_ Porque no te ha dado Dios un espíritu de cobardía, si no de poder, de amor y de dominio propio.
_ Él conforta mi alma, renovará mis fuerzas y podré volar como las águilas.
_ Así sea.
_ Así sea.
_ Cumple con tu tratamiento, se disciplinada y tómalo con mucha seriedad. Se paciente.
_ Lo haré.
_ ¿Quieres agregar algo?
_ No.
_ Dios te bendiga, Martha. Si necesitas que vuelva a venir, dile a tu médico. Vendré con gusto.
_ Gracias Padre.
_ De nada, Mujer. ¡Martha! ¡Martha! No te afanes por las cosas del mundo.

Martha recordó inmediatamente el pasaje de la biblia. El padre sonrió y salió del consultorio.

Martha había nacido en un hogar católico. A pesar de ello, su familia no se congregaba. No eran nada religiosos. Provenía de un hogar tradicional con muchas costumbres arraigadas. Pero la religión definitivamente no era su fuerte ni mucho menos su prioridad.

Martha desde niña tomaba la biblia que había en su casa y la leía. La había leído de principio a fin, muchas veces a lo largo de su vida. Siempre tuvo esa necesidad de Dios. Esa necesidad de conocer. Cuando surgía alguna duda, acudía a personas allegadas a alguna iglesia. La que fuese.

Sabía que había algo más que una simple armadura. Se resistía a creer que la vida misma no tenía un propósito. No solo para ella si no para el resto del mundo.

Martha siempre pensaba en ello.

Somos seres espirituales viviendo una experiencia humana.

Al menos eso creía ella.

**outsidernow** · Publicado: Mar 15 2019 **Título**:

Oooh

**Guerrita** · Publicado: Mar 16 2019 **Título**:

Soy hacker y acabo en la cárcel por exceso de velocidá con mi 'amoto'

Me estoy imaginando a mí misma como Lisbeth Salander

**outsidernow** · Publicado: Mar 16 2019 **Título**:

**S e l f r u l e d** · Publicado: Mar 16 2019 **Título**:

**Martha-16** · Publicado: Mar 16 2019 **Título**:

**outsidernow** · Publicado: Mar 16 2019 **Título**:

**Martha-16** · Publicado: Mar 16 2019 **Título**:

Guanatitos
Segunda Temporada
Episodio 3

Paloma era maestra de educación superior, miembro activo de la organización de Guanatitas Unidas y en su tiempo libre daba clases de baile.

Ella era a.man.te. de los vegetales. Disfrutaba al máximo los viajes a la playa, por lo que solía hacerlos con frecuencia. Era de esas mujeres de todo o nada. La amaban o la odiaban, ya que era brutalmente honesta.

Tenía varios pretendientes, ya que era muy guapa.

Uno de esos pretendientes era Valentin, quién solía cantar en las noches en la taberna del lobo.

Martha solía llamarlo Estetoscopio Medina Chaires, porque le recordaba a un personaje de Víctor Trujillo, quien en sus inicios tenía un programa llamado La Caravana, donde presentaba un cómico sketch de este ilustre personaje

_ Otra vez ese, pensó Silueta.
_ Hola Palomita.
_ Hola.
_ Para dónde caminas? tu.
_ Voy a mis clases de baile.
_ Qué vas a hacer por la noche

_ Todo menos salir contigo, puedo asegurarlo.
_ No pos si no quiero que salgas conmigo, cuándo vas a ir a verme a la taberna

_ Verte?
_ Bueno a escucharme cantar, atarantada.
_ Vaya Valentín, si que eres muy galante

debes tener muchísimas mujeres a tus pies

con tu presencia y sobretodo por tu perfecto vocabulario

_ Tanto así?

_

_ Sabía que me traías ganas pero no tanto

_

_ No te pongas nerviosa mamacita

_

_ Entonces?
_ Iré a mis clases de baile. Adiós.
_ La traigo muerta

_

(alcanzó a escuchar, Paloma)

Martha estaba sentada en una banca del jardín, tratando de respirar aire fresco. Su vida había cambiado por completo. Recordó el último día de trabajo...

Martha comenzó sus labores desde las 8 am y había regresado a su casa a la 1 am. El trabajo la absorbía cada vez más.

Había asistido a una cena de trabajo en compañía de su jefe.

_ Necesito que estés a un lado de mí y estés muy atenta a todas las conversaciones. Toma nota de lo más importante: nombres, contactos, números de teléfono, pendientes. Tú sabes perfectamente que hacer. Confío mucho en tí.
_ Gracias.

Martha tomó aire, sentía una opresión en el pecho. Aún así, sonreía y era impecable ante los medios.

_ Hola buenas noches.
_ Buenas noches.
_ Me gustaría entrevistar a tu jefe.
_ Porsupuesto.
_ Te envío el correo el lunes.
_ Esta bien.
_ Gracias.
_ Al contrario, gracias a ti.

Martha imaginó su vida de otra manera. Ella siempre creyó que trabajaría con niños, quizá hubiera sido maestra o hubiera continuado concursando. Era oradora y había ganado muchos campeonatos. El problema de Martha era que tenía una mama bastante controladora. Pasó mucho tiempo de su vida, complaciendo sus órdenes. Estaba cansada, de ella, de todo y de todos. Estaba harta, a punto de colapsar y lamentablemente lo hizo.

Después de la cena llegó a su casa. Vivía sola en un departamento de la ciudad. Tomó un poco de agua y se fue a dormir.

_ Mañana será otro día... (Suspiró al ver que el reloj marcaba las 2 am y estaba citada en su oficina a las 8 de la mañana) Bueno, ya es mañana (Sonrió con ironía) trataré de descansar.

_ Un dos tres, giro y cierro¡ Un dos tres, giro y cierro¡

Paloma impartía la clase y todos bailaban a ritmo de salsa 🎶🎶🎶🎶🎶🎶🎶🎶🎶🎶🎶🎶

El Profesor Giordano Bruno era uno de sus alumnos, también estaba Llalla, Yavanna, Doonga y Magionne

Magionne amaba a Silueta en secreto, por eso se había inscrito en sus clases. Él era un romántico empedernido que gustaba de la balada pop a decir verdad. Por lo que eso de las clases de salsa era tan solo un pretexto para estar cerca de ella.

Los Guanatitos bailaban, se divertían y sonreían mucho.

Guanatitos era ese lugar ideal en el que Martha siempre quiso vivir.