Desde hace 80 años, y de manera especial en la actualidad los mexicanos tenemos en nuestro léxico varias opciones para decir groserías.
Por ejemplo, si quieres reprender a una persona que tiene "mano larga", es decir, que le gusta obtener más beneficios económicos o materiales de los que la moral le permite, puedes referirte a esa persona con este vocablo: inche DIPUTADO desgraciado..., y si su avaricia es destacada, puedes añadirle severidad al vocablo anterior usando este otro: inche SENADOR desgraciado...
O si lo prefieres, puedes alternar los vocablos anteriores con estos otros: inche PRESIDENTE DE LA REPÚBLICA desgraciado...; inche GOBERNADOR desgraciado...; inche JUEZ desgraciado...; inche SECRETARIO desgraciado...; inche MAGISTRADO desgraciado...; inche OMBUDSMAN desgraciado...; inche POLÍTICO desgraciado...
También puedes usar esas palabras para agredir a una persona que te haya defraudado, que sea un traidor, que sea un mercenario, que sea un parásito, que sea un aprovechado, que sea una rémora, etc.
Y si quieres definir una institución nefasta traidora, corrupta, barril sin fondo, que defraude, que cobre por hacerse mensa y por hacer tontos a los demás, puedes usar estos vocablos: inche PARTIDO POLÍTICO desgraciado...; inche IFE desgraciado...; inche SEP desgraciado...; inche MAGISTRADO desgraciado...; inche SINDICATO DE PEMEX desgraciado...; inche SINDICATO DEL IMSS desgraciado...
Responder
|