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Cuando erámos niños, nos sabiamos pequeños y lo disfrutabámos pues ignorabámos completamente las penurias de ser adulto algunos solo jugaban y reian ajenos a cualquier circunstancia adversa, otros en cambio, tuvieron experiencias de vida muy distintas a las que se esperan en una infancia feliz, tal vez sufrieron maltrato, quizás necesitaron salir a enfrentarse a la vida a muy temprana edad dejando los juegos y la despreocupación de lado, esos niños inevitablemente crecieron incorporándose precozmente al mundo de los adultos, se convirtieron en uno de esos personajes que inicialmente tenian la misión de cuidarlos a ellos, ahora ellos son los "grandes" tal vez se casaron formaron una familia, o tal vez se desempeñan en algún empleo adquiriendo el cien por ciento de sus obligaciones.
Si tú que ahora estas leyendo esto te sientes identificado o fuiste una de estas millones de historias, tal vez te ha pasado que no te has dado tiempo de recordar esa "infancia" pues quizás te paso desapercibida por las obligaciones que fuiste adquiriendo, muchas veces el tener estos llamados "asuntos inconclusos" que básicamente se enfocan en lo que "dejamos de hacer" lo que "perdimos" nos provocan pequeñas frustraciones en determinados momentos y aspectos de nuestra vida en general, ¿te haz preguntado dónde quedo ese niño pequeño que eras? ¿dónde quedaron sus juegos? ¿sus sueños? ¿alguna vez te has tomado 5 minutos de tu apretada vida para mirar hacia atrás y evaluar que fue eso que te falto? Es muy probable que no lo hayas hecho y no es tu culpa es simplemente porque esta información se encuentra bien guardada en nuestro "Inconsciente" solo que a veces alguien toca el botón de encendido sin saberlo y es ahi donde recordamos, es momento de ponernos tristes o de enojarnos con todos, con la vida, con nuestros padres, con nosotros mismos empezamos a estar irritables a la defensiva, nos deprimimos en fin vienen un cúmulo de emociones que se agolpan en nuestra cabeza y que en diversas ocasiones se nos salen de las manos, si es tu caso no te culpes no te conviertas en tu peor enemigo, la respuesta a todas estas emociones esta precisamente de donde viene todo en nuestro interior, trabajar con nuestro niño interno es la mejor opción para sanar nuestro ahora, porque ese niño, el que fuimos se encuentra ahí adentro esperando a que lo abraces y lo protejas ahora que ya eres adulto.
SE LOS DEJO DE TAREA, LINDA TARDE! 
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