Originalmente los esquites era en el comal, los tostaban y te los daban en una hoja de maíz. Tomaron auge en los 70 cuando en Coyoacán los servían hervidos y con tequesquite. Había colas formados a un lado de la plaza Hidalgo.
Algún cronista decía, Coyoacán es deambular para comer nieves de la Siberia, degustar esquites en la plaza de los coyotes, tomar una cerveza en la Puerta del sol, o estar en el ambiente de la Guadalupana.