Así es. Crecí en un hogar demasiado tradicional, me educaron para ser una mujer de casa, por lo que se hacer de comer, planchar, lavar, limpiar la casa, coser, etc. En mi familia se inculco la virginidad como lo más importante que podía dar una mujer. A pesar de todo esto, fui a la escuela donde recibí otro tipo de educación, y también por azares del destino tuve un trabajo demasiado inusual para una mujer como yo. Lamentablemente me di cuenta que ese rollo de la virginidad, era solo eso un rollo. Los hombres que encontre en mi camino eran personas muy dañadas, tanto psicológicamente, emocional, física, etc. Así que los cuentos de caballeros, eran solo eso un cuento. Despues de todo lo sucedido, pude por fin alcanzar mi estabilidad emocional en cuanto a la relación con el s.e.x.o opuesto. Ahora sé exactamente lo que quiero y lo que estoy dispuesta a dar. Todo eso ahora me parece una pesadilla de la que desperté...
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