Libro del Deuteronomio, capítulo 30:
11.
Porque estos mandamientos que yo te prescribo hoy no son superiores a tus fuerzas, ni están fuera de tu alcance.
12.
No están en el cielo, para que hayas de decir: «¿Quién subirá por nosotros al cielo a buscarlos para que los oigamos y los pongamos en práctica?»
13.
Ni están al otro lado del mar, para que hayas de decir: «¿Quién irá por nosotros al otro lado del mar a buscarlos para que los oigamos y los pongamos en práctica?»
14.
Sino que la palabra está bien cerca de ti, está en tu boca y en tu corazón para que la pongas en práctica.
15.
Mira, yo pongo hoy ante ti vida y felicidad, muerte y desgracia.
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