Hace un tiempo, regresando del club donde últimamente asisto con mi hijo y mi aun esposa, ella me pidió que por favor la llevara a casa de sus padres en vez de la suya pues tenía que llevarles unos papeles, y a la vez darme unas cosas del niño de su escuela. Llegamos y me estacioné en la entrada mientras ella recogía sus cosas y se llevaba con ella a mi hijo, "bye mi niño, te quiero mucho papacito, muah muah" y desaparecieron ambos en la semi oscuridad. Un par de minutos después regresó ella con las cosas y se sentó de nuevo junto a mi, afuera sólo se escuchaban voces lejanas de algunos vecinos y los típicos sonidos de la noche.
Entonces se recostó de repente en mi pecho.
Hacía ya mucho que no estabamos tan cerca uno del otro en esa situación y aunque al principio por reflejo intenté rechazarla, la verdad es que fue tan rápida, justa y sorpresiva su acción que en primer lugar no me dio tiempo y en segundo, que me llegó el delicioso aroma de su cuerpo recién bañada: Fresco pero tibio al mismo tiempo y luego más que de inmediato me puso su mano en mi vientre y luego sin decir agua va comenzó a acariciarme el pe.ne por encima de mi pants deportivo. Luego está la manera como volteó a verme, como con autoridad pero al mismo tiempo con malicia y haciendo gestos semi obscenos con sus labios, deliciosos por cierto, y uno de sus mejores atributos, todo lo cual me sacó por completo de lo que yo esperararía de ella, la verdad parecía otra, y lo peor es que no me era nada desagradable...
"Bajate poquito el pants", me dijo susurrándome, y para eso ya su mano me había puesto el pe.ne durísimo y listo para lo que sea. Ahí fue cuando perdí cualquier control que me quedaba.
Y es que cuando levanté las caderas en mi posición aun al volante de mi camioneta y me deslicé el pants, el resorte de la cintura me presionó el pe.ne hacia abajo, contra mis piernas abiertas, sólo para ser liberado como un resorte igual cuando el pantalón me llegó hasta los muslos, y como no uso ropa interior... el caso es que ese detalle no pasó desapercibido para ella y apenas alcanzó a decir despacito, en una mezcla de admiración, miedo y excitación: "Oh my god". "¿Qué?" Le dije. "¿Te gusta?" "Si", contestó, y para entonces ya su mano subia golosa de arriba a abajo por el mismo mientras yo sentía como si la sangre me llegara y me llenara al tope a cien por hora. Sucedió tan rápido todo y los dos nos excitamos tanto que luego que le pregunté de nuevo, "por qué te gusta?", y para cuando me respondió diciendo: "Es que está bien grande... y bien dura", esto último ya casi sin aliento, yo ya sabía que iba a poseerla ahí mismo aunque a mi suegra le diera el soponcio de haberse dado cuenta. "Pues agarrala bien, con tus dos manitas", le respondí igual con la voz entrecortada lo cual obedeció de inmediato llenándolas de la más potente erección que me ha llegado en mucho tiempo y jalando firmemente mientras seguía con su show de gestos con su boquita. Sin más miramientos la recosté en el asiento y de un tirón le bajé el shorcito que traía del gym casi al mismo tiempo que su tanga, era delicioso oirla gemir con anticipación pero diciendome al mismo tiempo "despacito papi, despacito"... Qué despacito ni qué demonios, en dos segundos ya estaba adentro de ella, con una pierna en el hombro y sentado ligeramente sobre la otra y bombeándola como que no habia mañana. Uff, qué manera de gemir, qué manera de voltear a verme, y luego, seguía suplicándome según que "despacito", pero sólo había que ver como se retorcía de placer y las caras que hacia cuando le llegaba hasta el útero para darse cuenta que: Una le estaba encantando a la muy cabr*ona y dos, que me lo decía porque se daba cuenta que con más impetu y sin piedad la penetraba... Diablos, que cog*ida más deliciosa le pegué, así mismo en esa misma posición pero variandole cada ángulo, al mismo tiempo que volteaba a la entrada de la casa en tinieblas a ver si alguien venia o si habían oído sus gemidos...
Cero condón, cero preparativos, cero contemplaciones, se vino a gritos una y otra vez, antes de que por más que intentara prolongarlo terminara yo también, todo un récord bajo, unos 10-12 minutos cuando mucho, pero cara*jo, quién puede controlarse más tiempo cuando tu esposa o pareja habitual se convierte asi de pronto en lo que menos te esperabas?
Saludos!
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