Tuve un novio que por desgracia se encuentra paralítico. Un día me invitó a salír. Ya saben, me arregle lo más femenina y me pusé unas zapatillas de tacón alto, brillantes, blancas, preciosas. Me costarón muy caras. Total que salímos y me dijó que me llevaría a un lugar muy especial. En la camioneta nos conducimos hasta la punta de un cerro, donde me mostró unas rocas que él había grabado cuando era niño. Fue una tarde maravillosa, el viento tocaba mi cara, podía ver toda la ciudad. Él y yo compartiamos silencios, sonrisas y platicas bonitas e interesantes. Cuando regresamos, la camioneta se atascó. Él me dijó que nadie subía hasta allí. Las cosas comenzarón a tensarsé, él estaba enojado, bastante preocupado y desesperado. Así que le pregunté cómo podíamos salír de allí. Él me explico lo que tenía que hacer, me bajé de la camioneta y seguí sus instrucciones al pie de la letra. Mis zapatillas se arruinarón completamente. Cuando regresabamos, él comenzó a regañarme diciéndo que cómo se me ocurría ponerme esos zapatos, viendo la situación en la que él se encontraba. Lo escuché y al mismo tiempo pensé que eso quería decirmelo desde hace algún tiempo pero no se atrevía. Acepté que los zapatos habían sido un error, pero lo bueno era que habíamos salido de la sierra. Al llegar a la ciudad, le pedí que nos detuvieramos en una tienda y compré unas sandalias baratas. Llegamos a una tienda de auto servicio y yo, literal. Me acerqué a una llave, me quité los tacones, me enjuague los pies, me pusé las sandalias y tiré los tacones a la basura. Cuando regrese a la camioneta el me veía con cara de shock. Sin decir más del asunto fuimos a cenar. A partir de esa fecha comenzé a usar tenis, botas, zapatos de piso para poder ayudarlo a desplazarse con más facilidad y prevenir otra situación como la que vivímos en la sierra. Duramos un año juntos. Fuí muy feliz. Lo quisé con toda mi alma. Ese amor me dió lo más valioso que puede adquirír un ser humano "experiencia". Espero les halla gustado mi historia de amor, y ojalá quieran compartír algunas.
Responder
|