Esas canciones viejitas pero bonitas, no tan viejitas, contemporáneas y demás, de esas que sencillamente es un placer escucharlas, cargadas de romanticismo, de ternura... ¡Ah! Hoy me siento enamorada...
Ya no estás más a mi lado corazón
En el alma sólo tengo soledad
Y si ya no puedo verte
Por qué dios me hizo quererte
Para hacerme sufrir más?
Siempre fuiste la razón de mi existir
Adorarte para mi fue religión
Y en tus besos yo encontraba
El calor que me brindaban
El amor y la pasión.
Es la historia de un amor
Como no hay otra igual
Que me hizo comprender
Todo el bien todo el mal
Que le dió luz a mi vida
Apagándola después.
Ay, qué vida tan oscura
Sin tu amor no viviré.
Como yo te amo,
como yo te amo,
convéncete, convéncete,
nadie te amará
nadie te amara....
Como yo te amo,
como yo te amo,
olvídate, olvídate,
nadie te amará,
nadie te amará
nadie, porque...
Yo te amo con la fuerza de los mares,
yo te amo con el ímpetu del viento,
yo te amo en la distancia y en el tiempo,
yo te amo con mi alma y con mi carne,
yo te amo como el niño a su mañana,
yo te amo como el hombre a su recuerdo,
yo te amo a puro grito y en silencio,
yo te amo de una forma sobrehumana,
yo te amo en la alegría y en el llanto,
yo te amo en el peligro y en la calma,
yo te amo cuando gritas cuando callas,
yo te amo tanto, yo te amo tanto, yo.