Anécdotas célebres y otros tópicos.

Si esa de maggiones estuvo buena, y la de Churchill me hizo reír mucho.

Aquí va otra:

Única intervención parlamentaria.-

Desde 1687 a 1690, Isaac Newton fue miembro del Parlamento británico en representación de la Universidad de Cambridge. Durante el tiempo ocupó el cargo sólo pidió la palabra en una ocasión y fue para decir lo siguiente:

- "Propongo cerrar esa ventana porque aquí hace mucho frío".

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Muy buenas! la de Churchill sí la conocía.


Leí que una vez le preguntaron al genial pintor Pierre Auguste Renoir (por cierto, uno de mis favoritos) cómo conseguía darle un aspecto tan delicado y a la vez sugerente a sus desnudos femeninos, y él contestó:

-Yo no hago más que pintar, pintar, pintar y seguir pintando... hasta que tengo ganas de pellizcar. Entonces sé que ya quedó bien.

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Muy buenas todas, algunas ya las había leído, deja recuerdo alguna buena.

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Buenas, aquí es la clínica para el control de la ira?...Sí, viene a la consulta?..



.NO PEND;;;;;;, TE VINE A PREGUNTAR POR PURO PURO GUSTO!!!

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Esta es sobre Diógenes el Cinico:

Al anunciar Filipo de Macedonia (el padre de Alejandro el Magno) que iba a atacar Corinto, todos los habitantes, como era de esperarse corrían de un lado para el otro dedicados a los trabajos de fortificación de las defensas de la ciudad, para poder resistir el asedio al que serían sometidos, cuando encontrándose Diógenes dentro de su tinaja en la que vivía, y al ver la apuración de la gente, repentinamente se puso de pie y empezó a empujar su tonel para hacerlo rodar de un lado para otro sin otro fin aparente. Uno de los ciudadamos intrigado le preguntó : -¿Por qué lo haces, Diógenes?-, y el filósofo le dijo: -Porque los veo a todos tan apurados haciendo algo y me dio pena estar yo aquí sin hacer nada. Así que echo a rodar mi tinaja, no teniendo otra cosa en qué ocuparme.

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Fìjate que si Verdugo, En mi àrea por ejemplo ; de el tiempo que yo estudiè la carrera a ahora , han habido infinidad de cambios en diagnòsticos y tratamientos.

Ahora hay especialidades y subespecialidades que incluso siendo yo interna , no existìan.



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l chofer de Einstein

Se cuenta que en los años 20 cuando Albert Einstein empezaba a ser conocido por su teoría de la relatividad, era con frecuencia solicitado por las universidades para dar conferencias. Dado que no le gustaba conducir y sin embargo el coche le resultaba muy cómodo para sus desplazamientos, contrató los servicios de un chofer.
Después de varios días de viaje, Einstein le comentó al chofer lo aburrido que era repetir lo mismo una y otra vez.

"Si quiere", le dijo el chofer, "le puedo sustituir por una noche. He oído su conferencia tantas veces que la puedo recitar palabra por palabra."

Einstein le tomó la palabra y antes de llegar al siguiente lugar, intercambiaron sus ropas y Einstein se puso al volante. Llegaron a la sala donde se iba a celebran la conferencia y como ninguno de los académicos presentes conocía a Einstein, no se descubrió el engaño.

El chofer expuso la conferencia que había oído a repetir tantas veces a Einstein. Al final, un profesor en la audiencia le hizo una pregunta. El chofer no tenía ni idea de cual podía ser la respuesta, sin embargo tuvo un golpe de inspiración y le contesto:

"La pregunta que me hace es tan sencilla que dejaré que mi chofer, que se encuentra al final de la sala, se la responda".

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Ese chofer era un genio.

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jajajajajajajajajajajajajaja

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Se cuenta que en la campaña militar que iba a llevar a cabo el Cónsul Romano Cayo Mario, ya por aquel entonces sobrepasaba los 50 o 60 años, dicha guerra era para evitar la invasión de los cimbrios y teutones tribus germanas que ya habían derrotado a varias legiones romanas y que amenazaban con invadir Italia, pues resulta que habiendo construido un campamento fortificado los legionarios de Mario, cerca de la posición de los germanos, esto con la finalidad de que sus soldados se acostumbraran a la presencia de esos míticos guerreros de talla más alta que los romanos y con esto les perdieran el miedo, en esas circunstancias era común que grupos de guerreros Cimbrios y teutones se acercaran al campamento romano y retaran al más valiente a batirse en duelo, esto solo como provocación, y en una de esas ocasiones uno de los caudillos germanos se acercó a la empalizada y al parecer sabía hablar latin y mejor aun, conocía el nombre del cónsul; por lo que le gritó a fin de que todos sus hombres escucharan: "Cayo Mario si eres tan buen general sal y pelea contra mí, y si me vences nos vamos" a lo que el astuto general le contesto a su vez: "Y si tú eres mejor general que yo, fórzame a salir".

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El Peso del Cerebro

Bischoff fue uno de los anatomistas de mayor prestigio en Europa en los 1870's. Una de sus ocupaciones era el pesar cerebros humanos, y tras años de acumular datos observo que el peso medio del cerebro de un hombre era 1350 gramos, mientras que el promedio para las mujeres era de 1250 gramos.

Durante toda su vida utilizo este hecho para defender ardientemente una supuesta superioridad mental de los hombres sobre las mujeres. Siendo un científico modelo, a su muerte dono su propio cerebro para su colección. El correspondiente análisis indicó que pesaba 1245 gramos.

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El hombre más feliz del mundo:

Se cuenta lo siguiente acerca de Solón de Atenas: Al finalizar este personaje de elaborar y poner en marcha la primera constitución política de Atenas se autoexilió por cerca de 10 años, con la finalidad de no tener la tentación de convertirse en Tirano, se dice que estuvo en lugares como Egipto, y cuando llegó a Lidia, fue invitado por el rey Creso en su residencia real de Sardes, dicho monarca reinaba un estado muy próspero, Creso quiso mostrarle a Solón sus tesoros y su palacio, y al final le preguntó si no le consideraba el hombre más feliz del mundo por todo ello, Solón dijo que no, entonces dime a quien consideras el hombre más feliz del mundo, insistió el Soberano:

Solón le mencionó dos casos; uno de un individuo que vivió prosperamente, y vio crecer a todos sus hijos y nacer a sus nietos y al final murió en una batalla, dónde sus conciudadanos le erigieron un monumento donde cayó heroicamente.

en el segundo mencionó el caso de una sacerdotisa que debía subir un carro sagrado al templo de Hera para celebrar un sacrificio y como no tenía animales con los que tirar del pesado carro y la ceremonia no podía esperarsus hijos se uncieron el yugo y llevaron a cabo la tarea de subir el carruaje, al llegar al templo su mama muy emocionada por la devoción de sus hijos, le pidió a Hera que les concediera el premio más hermoso, y fue así como los muchachos entraron a descansar en el templo y ya no volvierona despertar siendo ese el regalo de la diosa.

Creso sintiéndose desairado de no haber obtenido ni el segundo lugar del hombre más feliz del mundo y todavía que su Huésped antepuso a puros muertos; exclamó airado: ¿Por qué?

y la respuesta del sabio Griego fue la siguiente:

Porque ningún ser humano puede decirse feliz hasta que haya franqueado el último umbral, hasta que haya concluido la vida con un balance positivo, cada día puede traernos desgracias inesperadas y al cabo del tiempo muchas son las cosas que uno tiene que ver y por las que tiene que sufrir sin quererlo; de todos los días de la vida de una persona, no hay uno solo que traiga sucesos enteramente idénticos a los otros. Así pues Creso, el hombre no es más que puro azar.

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Luis Pasteur se hallaba
un día almorzando con su familia y algunos invitados; para terminar sirvieron
uvas como postre. Cuando sus húespedes se disponían a saborearlas, Pasteur
les advirtió: - Nada más peligroso que comer uvas sin antes lavarlas.


Para dar ejemplo comenzó
a lavar su racimo de uvas en el agua de un vaso.

-Efectivamente
- -añadió -, las uvas son siempre un poco húmedas por naturaleza, de manera
que las partículas de polvo que originan las enfermedades, y se hallaban
suspendidas en la atmósfera, se adhieren fácilmente al pellejo de la fruta.



Después,
desarrollando algo más a fondo del tema, Pasteur comenzó a describir los
microbios, los bacilos, los gérmenes de todo género que podían contaminar
un racimo de uvas.

Sus acompañantes lo escuchaban
con respeto e interés. Pero nadie pudo contener la risa y en cierto momento
estalló una carcajada general, porque Pasteur, distraídamente, acababa de
beber el agua del vaso en que lavó las uvas.

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¡¡'¡EUREKA!!!

Herón II, rey de Siracusa, pidió un día a su pariente Arquímedes (aprox. 287 a.C. - aprox. 212 a.C.), que comprobara si una corona que había encargado a un orfebre local era realmente de oro puro. El rey le pidió también de forma expresa que no dañase la corona.

Arquímedes dio vueltas y vueltas al problema sin saber como atacarlo, hasta que un día, al meterse en la bañera para darse un baño, se le ocurrió la solución. Pensó que el agua que se desbordaba tenía que ser igual al volumen de su cuerpo que estaba sumergido. Si medía el agua que rebosaba al meter la corona, conocería el volumen de la misma y a continuación podría compararlo con el volumen de un objeto de oro del mismo peso que la corona. Si los volúmenes no fuesen iguales, sería una prueba de que la corona no era de oro puro.

A consecuencia de la excitación que le produjo su descubrimiento, Arquímedes salió del baño y fue corriendo des.nudo como estaba hacia el palacio gritando : "¡Lo encontré! ¡Lo encontré!".

La palabra griega "¡Eureka!" utilizada por Arquímedes, ha quedado desde entonces como una expresión que indica la realización de un descubrimiento.

Al llevar a la práctica lo descubierto, se comprobó que la corona tenía un volumen mayor que un objeto de oro de su mismo peso. Contenía plata que es un metal menos denso que el oro.

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