Como se lleva un lunar todos podemos una mancha llevar, en este mundo tan profano quién muere límpio no ha sido humano, si vieras que terribles resultan las gentes demasiado buenas, como no comprenden parece que perdonan pero en el fondo siempre nos condenan. Ven conmigo mi amor, qué tus errores no me causan temor, pues más qué todos ellos vale uno solo de tus cabellos, como eres, así yo te quiero es por eso que aveces al sentir tú mirada, doy espaldas al mundo para adorar tú cara.
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