MALDAD

Está tarde aborde un taxi, le pedi al chofer q m llevará al pueblo vecino, d pronto unas calles despues, él dijo: Le voy a cobrar cien pesos. En serio? le dije Yo, m parece mucho dinero, es cerca. No se crea, como cree que le voy a cobrar cien pesos, ahí cobro 200. Trate d sonreír pero él no sonreía parecía q era serio. M observo x el espejo y dijo: No se crea. Guardamos silencio, al salir a la carretera dijo: Por qué va a?. Haré unas compras, dije seria. El volvío a mirarme x el espejo y dijo, cúando vamos para haya, las violamos, sabía? las violan. M quede en silencio, pense, si m pongo agresiva m hirá mál, si sonrío m hirá mál, si coqueteo como dicen los psicologos quizá compruebe la teoría, pero no quiero coquetear con este tipo. M recorrí y m puso justo atrás d él, saque d mi bolso las tijeras d manicure, para enterrarlas justo en el cuello. En día hay mucha violencia, nos destruimos unos a otros, le dije seria, los taxis se prestan a muchas situaciones ilicitas, pero hasta ahora

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no tengo queja alguna, m han dado un buen servicio. Hubo silencio. La han violado? m pregunto. No, nunca, hasta ahora no, conteste seria, fría. Todo el camino inhalaba oliendo mi perfume y hacía expresiones como d placer, Yo permanecía quieta y seria, esperando una causa x la cual tendría q enterrarle mis tijeras. X fin llegamos al otro pueblo, se detuvo, baje tranquila. Me miró a los ojos y me dijo, llegamos, sana y salva. Si, le respondi, muchas gracias, cúanto le debo?. Cincuenta pesos, dijo. le di el billete y me acaricio la mano, mis dedos, sin sonreir la retire, gracias, le dije nuevamente y me di la vuelta. Cuidese, me dijo al darle la espalda. Si, gracias, usted también, que pase buena tarde, y continúe mi camino. M temblaban las piernas, cúanta maldad, una vez leí q somos un animal racional que se destruye entre si mismo. Y así es, toda la razón. Estoy bien, todo paso. pero... q pasaría con la siguiente...

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Le hubieras dicho:

"Sí, se oyen muchas historias macabras relacionadas con los taxis. El otro día leí que encontraron muerto a un taxista. Lo golpearon, asaltaron y de los golpes un ojo le quedó colgando hasta la nariz"...

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MARTHA ¡QUÉ MIEDO!

RECUERDO QUE CUANDO ESTABA ESTUDIANDO LA LICENCIATURA, YO SALIA A LAS 10:00 PM, PERO ESE DÍA ME EXCEDÍ, LA ÚLTIMA CLASE ERA "HISTORIA DE LOS PAÍSES DE LATINOAMERICA" ME ENCANTABA ESA CLASE Y COMO EL MAESTRO LA IMPARTÍA, ESTABA LLOVIENDO Y HACIA MUCHO FRÍO, ASÍ QUE QUE HABÍA POCA GENTE EN LA CALLE, PARA COLMO NO HABÍA IDO MI NOVIO POR MI PORQUE ESTABA ENFERMO.

ESE DÍA HABÍAMOS IDO MUY POCOS A CLASE, SUPONGO QUE POR EL CLIMA, ASÍ QUE TOME UN TAXI, YO SENTÍA QUE EL CHOFER ME OBSERVABA Y ME OBSERVABA POR EL ESPEJO, SOY DISTRAÍDA Y CUANDO MENOS ACORDE ÍBAMOS POR CALLES QUE YO NO CONOCÍA, DE UN LADO CASAS Y DEL OTRO LADO PLANTAS.

ME SOBRESALTE Y YA SABEN ESTE CARÁCTER QUE TENGO, LO MIRE YO TAMBIÉN POR EL ESPEJO Y MUY FIRME LE DIJE ¡OIGA, POR AQUÍ NO ES EL CAMINO! PARA ESTO MI HERMANO ME HABÍA REGALADO UN BOTE DE GAS PIMIENTA, PUSE UNA MANO EN LA MANIJA DE LA PUERTA Y LA OTRA EN EL BOTE DEL GAS, ABRÍ LA PUERTA HICE COMO QUE ME IBA A BAJAR Y EL AUTO AVANZANDO, SE ASUSTO.

ME DIJO ¡NO, NO, ESPERE! ES QUE SOY NUEVO EN ESTO Y ME PERDÍ (SI COMO NO) PERO AHORITA ME REGRESO, LAS CALLES SOLAS, NO SE VEÍA NADIE. CUANDO TOMÓ LAS CALLES CONOCIDAS, YO LE FUI DICIENDO POR DONDE TENIA QUE CIRCULAR.

CUANDO LLEGAMOS CERCA DE MI CASA LE DIJE AQUÍ ES, CUANDO ME IBA A BAJAR DESPUÉS DE HABERLE PAGADO ME DIJO QUE QUERÍA INVITARME A CENAR UNOS TACOS (JEJEJE) Y LE DIJE QUE NO, QUE MIS 4 HIJOS Y MI ESPOSO ME ESPERABAN PARA CENAR CON ELLOS (JAJAJA) Y ME DICE ¡AHHHH ESTÁ CASADA!, SI YA AVANCE QUE MI ESPOSO ES MUYYYYYY CELOSO Y ADEMÁS ES JUDICIAL (JAJAJA).

OBVIO NO ME BAJE EN DONDE REALMENTE VIVO Y TUVE QUE CAMINAR UNAS CUADRAS PARA LLEGAR A MI CASA, PERO PRIMERO ME FIJE QUE SE FUERA, Y YO EN TACONES Y VESTIDO CASI CORRÍ ¡ME TEMBLABAN LAS PIERNAS!


ESE SI ME QUERÍA LLEVAR PARA LO OSCURITO ¿EDA' MAGIONNE? AHORA ME DA RISA PERO EN SU MOMENTO SI ME DIO MIEDO ¡MUCHO MIEDO! SE ME HIZO ETERNO EL CAMINO.

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Para uno como hombre es diferente, pero no por ello menos peligroso y/o atemorizante.

Hace varios años, cuando recién nos venimos a vivir a este rancho de Los Angeles, renté un segundo piso para el proyecto de trabajo que traía entonces. Mi niño estaba chiquito, apenas comenzando a gatear con libertad. Mi espacio tenía varias suites, cocina y hasta showers, por lo que en un principio ahí trabajaba y vivía al mismo tiempo. Un día en la noche, cerca de las doce, escuché fuertes pisadas en el techo, obviamente se trataba de alguien caminando. Suena raro, pero en realidad no me asusté de inmediato, pues esos días habían estado entrando y saliendo hasta muy tarde trabajadores de los pasillos y suites vecinas. Estaba pues yo viendo televisión con el resto de luces apagadas, mi esposa durmiendo en nuestra recámara y mi niño en la suya. Silencio total apenas interrumpido por el leve volumen de la tele. Entonces comienzan los pisotones, y luego, ruido y desmadre y medio en el pasillo y las oficinas vecinas. Voy entonces y me asomo por la mirilla de la puerta, y veo a un gringo jóven, unos 20 años, entrando y saliendo de las suites de enfrente ya con las luces prendidas, con una extensión y quién sabe qué más en las manos, soltaba y tomaba cosas, y yo viendo todo el cuento desde mi puerta y aún pensando que el wey era un trabajador que en algo estaba entretenido y/o buscando. Entonces, se reflejaron las luces de un carro que pasaba, y ¡el wey se medio agachó! y miró furtivamente hacía la ventana del pasillo. Y yo: "¿Qué pex con este wey??" aún viendo todo desde mi mirilla. Sale y entra el wey una vez más y vuelve a pasar otro carro y lo mismo, se agachaba el gringo. Entonces, voltea una vez más hacia la ventana y se afianza a dos manos de las paredes de afuera y le suelta un patadón a mi puerta que rompe la relativamente débil chapa, y yo, por estar justo en la mirilla, me da con la puerta en el hocico. Grito entonces con todo el susto y coraje que me llegó de un instante a otro:

Arrrrrrrrrrrrrrrrggggggggggggghhhhh!!! pero así, bien gutural y macabro y temeroso y desesperado, todo al mismo tiempo. N'ombre, el wey se sacó el pu*to susto de su vida, salió corriendo como liebre y seguramente que se lanzó de cabeza por la ventana porque desapareció en un segundo sin dejar rastro alguno. Claro, mi esposa despertó y mientras frenéticos le llamabamos a la policía, yo aún intentaba recuperarme de las sensaciones que tan de repente me llenaron y comencé a temblar; de rabia, de temor e incluso de coraje conmigo mismo por no haber caído de inmediato que el cab*ón era un pin*che rata...

Llegó la policía en tres patadas y efectivamente, las suites de enfrente estaban forzadas y el wey había hecho un desmadre.

¿Y si yo hubiera estado también dormido y el wey hubiera pateado mi puerta? ¿Lo habría oído? ¿Qué hubiera hecho el wey al darse cuenta que ahí sí había gente a esa hora?

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yo QUIEROVIOLAR A UN TAXISTA!!!!
PERONO SE ME AHHH HECHO

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Todo lo que en un momento puede maquinar una mente. Vivimos en una sociedad dónde sobrevive él más fuerte, en la que en poco tiempo, de no tomarse medidas correctivas y preventivas por las autoridades, nos haremos justicia por nuestras propias manos. La experiencia de Self también fue desagradable, todo pasa en segundos, en los cuales la perdida del control está a la vuelta de la esquina, dónde en un momento existe la delgada línea entre la razón y la locura.

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