La escuela secundaria en México se cursa después de la educación básica de 6 años. Aquí le llaman media básica, porque la media superior es la preparatoria, vocacional o bachillerato.
En eso coincidimos. Para mi la preparatoria fue la época en la que me encontré a mi mismo. Sin embargo, una gran parte de mi generación de secundaria hizo el examen para la preparatoria y nos quedamos en la Escuela Nacional Preparatoria num. 6 de la UNAM.
Coincidió con mi llegada a la colonia donde se encuentra, mi familia se mudó allí en 1970 y ese año entré a esta secundaria que se encontraba a una cuadra de mi casa.
Hoy mi secundaria tienen un muy buen prestigio, en 2017 celebramos los 50 años de su apertura. La Escuela Secundaria Diurna # 101. A la que años más tarde nombraron como "Ludwig van Beethoven", al sur de la Ciudad de México.
Hace poco me hicieron llegar una fotografía al final de un bailable del día de las madres donde esta toda la generación cuando tenía 15 años, a ver si me encuentran entre todos mis compañeros.
Hoy a pesar de los años, nos volvimos encontrar en el cumpleaños 40 de la secundaria. Mis compañeros hoy son adultos, muchos con profesiones, otros con oficios, algunos están ya fallecidos y otros más nadie sabe dónde están.
En México cursas tres años con los mismos compañeros, en el mismo grupo académico. Algunos de nuestros maestros aún están vivos y fue maravilloso volverlos a encontrar. Ahora son adultos muy mayores. Recontamos los que ya fallecieron. Cuando nos reunimos recordamos las clases, las travesuras, la convivencia. Los momentos celebres. Un grupo compacto que aún se quiere.
Es curioso, pero cuando convocamos a reunirnos después de 40 años, al llegar nadie se reconocía bien. Nuestra fisonomía había cambiado, ahora estos señores no se reconocían ya. Hicimos para la ceremonia unas credenciales con los retratos de como habíamos salido de la secundaria y eso facilitaba el reconocimiento.
La comida en un restaurante al sur de la Ciudad, fue interesante, todos serios no se conocían, pero poco a poco la fisonomía los ademanes y el recuerdo regresó. Pero si eres fulanito, si eres sutanita. Hola que agradable encontrarte. Todos con vidas, con hijos e inclusive nietos.
En la secundaria elaboramos un periódico que titulamos "Canek" porque la sobrina de Ermilo Abreu Gómez, Esperanza, lo organizó y con ella atrajo a los compañeros del grupo.
Yo me hice cargo de las caricaturas, los monitos del periódico y sacaba de otros que había leído por allí, pero hice los dibujos yo mismo. Más tarde el primo de Miguel España, si el jugador de la UNAM, Vicente hizo otros más con lo que el periódico contó con dos caricaturistas.
Fue uno de los primeros periódicos estudiantiles de esta secundaria y se volvió una leyenda. Lo hacíamos en mimeógrafo, un reproductor que se hacía picando los esténciles. Yo aprendí a dibujar en esténcil que era una especie de lápiz con la punta mecánica que rasgaba lo suficiente el mismo para dejar pasar la tinta. Así vimos como la máquina, de marca Gestetner imprimía las copias que luego venderíamos como cuota de recuperación.
Al mismo tiempo, un compañero de los Scouts, pues yo pertenecí a ellos, tuvo la iniciativa de hacer un periódico para el grupo de escultistas. El periódico de Anteayer. Con ese vuelo me lancé a concursar en una de las semanas Scouts con un artículo sobre el bosque de Chapultepec que me corrigió el subjefe de grupo, un ahora conocido médico y millonario. Para mi sorpresa obtuve el primer premio de periodismo a la edad de 13 años, bajo el membrete de Novedades que era un periódico importante en ese momento. En el diploma que aún conservo viene la firma de Rómulo O'farril que era el director de ese periódico. Desde niño me gustaba escribir.
