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Los brasileños, enfadados por la inacción de Bolsonaro ante los incendios en el Amazonas, se han tomado las calles para exigir la dimisión del mandatario.
Los ciudadanos de varias ciudades del país, entre ellas Sao Paulo, Río de Janeiro y Brasilia (la capital) han realizado manifestaciones para urgir al Gobierno del presidente Jair Bolsonaro a preservar la selva amazónica de Brasil, que actualmente se consume con incendios forestales a un ritmo récord.
En Sao Paulo, los manifestantes se han congregado en el Museo de Arte de la ciudad, rodeados por fuerzas policiales, y han exigido la renuncia tanto de Bolsonaro como la del ministro de Medio Ambiente, Ricardo Salles, con eslóganes como “Bolsonaro se va, el Amazonas se queda”.
Estas protestas contra la inacción del jefe de Estado ultraderechista ante los mencionados incendios han reunido a estudiantes, empresarios, activistas y representantes de varias oenegés.
“Bolsonaro nunca ha tenido o tendrá ningún interés en la preservación del medio ambiente, por lo que cualquier acción que anuncie ahora solo será una reacción momentánea a las presiones en Brasil y en el extranjero”, ha señalado, por su parte, Ricardo Graça Aranha, un representante de los manifestantes.
(El presidente de Brasil, Jair) Bolsonaro nunca ha tenido o tendrá ningún interés en la preservación del medio ambiente, por lo que cualquier acción que anuncie ahora solo será una reacción momentánea a las presiones en Brasil y en el extranjero”, ha señalado por su parte Ricardo Graça Aranha, un representante de los manifestantes.
Por otro lado, las embajadas de Brasil en varios países del mundo, como Londres, Alemania, España, Argentina y Colombia, han sido escenario de protestas contra Bolsonaro y en defensa de la Amazonía.
Los incendios no dan tregua y son tan intensos que se pueden ver desde el espacio, incluso han alcanzado Bolivia, Ecuador y Perú, donde ya causan estragos, además de poner en peligro la vida de comunidades indígenas, animales y especies vegetales únicas en el mundo.
Bolsonaro, quien ha ordenado este viernes el despliegue del Ejército para combatir el flagelo, ha acusado en los últimos días a organizaciones no gubernamentales de estar detrás de los hechos, aunque no ha ofrecido ninguna prueba para respaldar su “sospecha”.
El líder indígena del país, Cacique Raoni, ha pedido esta misma jornada la ayuda de la comunidad internacional para “hacer partir lo más rápido posible” a Bolsonaro, al que ha responsabilizado por los incendios.
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